20/5/10

Mama Carnívora


Soy muy afortunada. Tengo que agradecer a dios lo afortunada que soy. No muchos tienen el lujo de asesinar a la mayoría de su familia y permanecer lo suficientemente lucidos para pararse en el lugar que me paro yo, para ver las cosas desde el lugar que las veo yo. No muchos tienen esa suerte. No muchos. Quien soy es relativo según el contexto, según las circunstancias. Mi d.n.i. afirma que me llamo Mercedes maciel. No se que significa eso. Seré tan mediocre para que toda mi identidad quede reducida a un papel. Seguramente que si... Soy mediocre por mis elecciones. Por que en vez de tomarme un colectivo e irme a Santa fe donde supongo que vive mama, me quede acá. Con la otra familia, me quede con ellos cuando no quería hacerlo. Me resulta repugnante no ser consciente de mis actos pero el tiempo deteriora, si, como se deteriora una planta mal cuidada o el cadáver de un ser querido. Yo mate a mi familia y desde ahí nace el sufrimiento. El sufrimiento que es ver todos los días el sol y no encontrarle un valor a lo que haces.Ver todos los días el sol y conocer muy dentro de tu piel que elegiste mal, que te equivocaste y cerraste 9,10,11 puertas a otras realidades diferentes mucho mas satisfactorias que esta. Hay dolor en saber que es imposible volver atrás. Los mate por que sabía que no podía volver atrás. Los mate por eso. Por que ellos me dejaron mirando el sol. Mi familia esta compuesta o estaba compuesta por mi marido José, julia la menor, tomas el del medio y Felipe el mas grande con 21 años. En su medida todos eran el sueño de esa niña Susanita que piensa en casarse y criar niños. Tan lindo criar niños, tan vulgar se vuelve lo profundo. Como ese arroz con leche que julia comía con pasión hasta descubrir que la pasión es costumbre y la costumbre es jaula. Ese arroz con leche perdía su valor después de unas varias cucharadas. Como los besos de mi marido antes de ir al trabajo, como la cocina bañada de los rayos de sol, la ventana y otra vez julia con el arroz con leche. Felipe era hermoso, era mi hijo más hermoso. Los ojos verdes que le alumbraban el alma eran heredados del padre.Felipe, Felipe Siempre con sus estudios tranquilamente. Lo que quería ser. En lo que se iba a convertir. Esa ambición por ser medico que quedaría a medio camino. Ja- ¿Nunca se imagino? ¿Nunca lo vio venir?. El era tan bueno, tan bueno que me daban ganas de vomitar, Tan, tan, tan pacifico como el hielo. Me daba miedo. Nunca se enojaba y siempre tenía una sonrisa tejida en la piel. Era muy calmo y lejano. Ni siquiera el padre podía llegar a el. Me pregunte como un joven podía ser tan centrado y no cuestionar nada. Volvió el miedo a mis ojos, que no eran verdes. Me recordó a mi misma. Espeluznante mente a mi misma con esos gestos blancos, fríos como estatua de mármol. Una chica sumisa a la que nadie podía llegar. Como un ángel calmo pero siniestra mente reducido a entregarse al mundo sin nada más. Sabiendo que lo que es negro no es blanco, que hay que decir que si y que las familias son la consumación de la vida plena. Me vi en el y me genero tanto rechazo, tanta mierda me nacía que chorreaba mi existencia. Como si el error de ser prudente y manso que yo alguna vez cometí volvía como espejo en el. Pasaban los días en reducidos minutos donde decidía como matarlos a todos. Felipe iba a ser el primero en morir. El viento que se enviciaba con el aire de la casa sentía, olía. La naturaleza era el inerte testigo que nunca habla. Nadie estaba en la casa,nadie,nadie,nadie.No se si yo misma no estaba en la casa sino que era otra la que tomo un cuchillo y se acerca al cuarto de Felipe. Aroma a menta. A masculino. El sol de la tarde y bostezo de hombre, entonces.... solo 10 minutos para mirarle los ojos y decirme a mi misma que todo esta bien, que el agujero que ahora en mas existiría solo seria producto de una mujer que debe ser libre.Triste y el aroma a mente otra vez. Un día cuando el tenia 2 años me miro y lloro, seguro sabia, seguro de chico sabia. Un movimiento rápido y zazzz. Dividí su garganta en una artificial sonrisa de sangre, lo hice, intento gritar pero no pudo, intento escapar pero no pudo, supongo que intento entender pero no pudo. Sus ojitos verdes perdieron miedo y así había comenzado. Comenzar a saber que no hay punto donde pueda arrepentirme, por que soy yo, ¿como podría pensar en otros si la que es prisionera de este desgastado cuerpo y ve las cosas como las ve soy únicamente yo? jajajajajajaj Como detesto el olor a menta. Pronto llegarían julia y tomas. El repulsivo de mi marido no viene hasta la noche.... no, no vino hasta la noche, no vino hasta esa noche. Julia y tomas vinieron. Leche con tostadas y mermeladas, merienda con televisión y un hermano muerto en el cuarto del fondo. Como matar a estos dos. a estos dos angelitos que me devoran la piel. Ojala algún día alguien pueda entenderme. No, ojala me linchen a prejuicios. Me crucifiquen pero no. jamás querré la mirada de compasión de nadie, esos ojos compasivos con los que me miro Felipe, los aborrecí, por que ellos sabían, ellos sabían, estoy segura. 1 l de leche,250 gr de arroz,100 gr de azúcar,1 limón,1 canela en rama, 2 cucharadas de canela en polvo, cantidades ilimitadas de esos cebos para matar cucarachas y tenemos el perfecto arroz con leche mortal. Amaba ver como julia hervía de ansiedad para que pueda degustar su postre favorito. Amaba esa sensación de saber que el preciado bocado es el último. Convulsiono, escupió algo horrible que preferí no mirar, el sonido era como un pez pequeño que salio a la superficie, a esta le costo salir a la superficie, entender que debajo de la superficie hay otra cosa. Algo más perpetuo y humano que el propio tradicionalismo. Salio a la superficie para ver que el arroz con leche y la merienda no eran mas que la farsa de la que le toco ser victima y victimaria. Morite julia. Morite. Una cosa fría, muy fría se me incrustaba en el estomago. ¡Que suerte! se murió al fin! tomo mas tiempo que Felipe pero esta, esta donde tiene que estar. Que cosa fría, insoportable. La nena había muerto y yo tenía las tripas tirantes como...... El otro se quedo callado, nunca en su puta vida volvió a hablar. Quiero que hable, que me regale palabras. Tomas es miedoso por eso lo deje vivir. Por que tiene tanto miedo llora. Yo no lo escucho. Será que el tenia que morir, pero no, el parto con el no se por que fue complicado, casi nos mata a los dos. Me da gracia pensar que el desde su intento de llegar al mundo quiso tal vez asesinarme con inocencia. Para prevenirme, para cuidarme. Lo quiero a tomas. Tendríamos que haber muerto juntos. Por eso ahora le regalo la vida de nuevo pero no habla. A veces le pego fuerte, tan fuerte como ese sol de las tres de la tarde que no perdona, para que hable, para que juzgue pero nada de nada. Tomas no habla. No llora. No muere. Su razón es un no y juega juegos raros. El es un no así de grande como el vacío que se apodero de esta casa. ¡¡¡Estoy harta del vacío!!! ¡Harta! ¿Para algo los mate no?veni que te sale sangre de la nariz. Quiero ver como se acomoda la mancha roja, re linda sobre tu piel. Me gusta verte triste por lo que no puede volver. Tranquilo, no van a volver. Tomas es muy educado. Lee mucho y le gusta el francés. Claro que si tomas. Claro que si. El pobre no entiende que no tengo tiempo para escucharlo hablar en otro idioma. Tengo este pedazo de hielo en el estomago que me esta matando, un horror. ¿Esto es el miedo, la culpa? que tomas juegue, el es educado y no molesta. No molestes o te saco los ojos mientras dormís. Gracias tomas. Los días pasan y mis seguridades se van desarmando, no comprendo donde las cosas dejan de ser cosas y pasan a ser adornos tontos de vacaciones repetitivas de mar del plata. La diferencia entre un adorno de dos pesos y un hijo se hace cada vez más invisible. No me importa nada, nada de nada. Si alguno de ellos me hubiera importado algo habría ido una psicóloga o a un consultor matrimonial pero no... Nada me importaba. El tuvo la culpa. Cuando me ofreció ese anillo barato de casamiento me prometió ser la felicidad que inundaría todos mis días. No podía tomar en serio a alguien tan cursi. Me inundaba mas un jarrón de te helado que su presencia. Soy mala, soy horrible, otra vez el frió mezclado con el olor a menta. Debe ser un castigo o algo así... El no era malo. De tan bueno te asustaba. Era simple, quería sus camisas bien planchadas y poder mirar el partido los domingos a la noche, le gustaba la masa casera que preparaba para pizzas. Tan bueno. Trabajaba mucho y le pagaban bien. Era duramente honesto y eso me irritaba. La honestidad es para gente que esta preparada para aceptarla. Me molestaba su hola sin interés cuando llegaba de trabajar. Esa rutina de preguntarle como le había ido y que me conteste con desgano algo sobre lo que yo ya tenía respuesta. Si no pregunto y callo estoy mal o deprimida, suena la alarma y el falso superhéroe de mi marido finge escucharme un poquito, me abraza con gusto a café de oficina y se va probar sus camisas bien planchadas. Se ríe y es cómplice con los varones, dulce y atento con la única hija. Todo el carisma de un padre que es luz. Yo nunca fui luz y creo que el lo sabia, por eso me amaba. que asco, amaba ¿que es eso?. vi. su auto estacionar. Que lindo que es. Tiene cuerpo de hombre bueno. Tenia miedo de que viera el paisaje contaminado de muerte y pudiera matarme el a mi. Bah, tenia miedo de yo no poder matarlo a el. Me puse al lado de la puerta. Entro. El hola familia que tanto me oxidaba. El odio que era sangre y dos o siete puñaladas rápidas. Se resbalo y cayó, creo que vio a julia tirada con algo líquido en la boca. Creo, No estoy segura. Tardo mas en morir. Gemía mucho. Había sangre y odio derrochado por todo el piso, yo estaba un poquito más que contenta. un poquito. Esa sensación de triunfo que cuesta saborear en totalidad. Sentí los rayos del sol que me acariciaban diferente esta vez, una caricia certera pero gentil. Tomas lo vio morir. No lo toco en ningún momento. Esta bien. Hubiera sido inútil. Lo miro con cara rara, tomas es rara. Lo miro con una cara que me es indescifrable. Cara de algo raro, un poco de nostalgia, perdida con alegría. Tomas miro el cadáver de su papa con cara rara. Eso es todo. Papa murió, julia murió, Felipe murió. Mi jaula había sido rota, al fin mujer, al fin. Tengo ganas de no tener frió, tengo sueño, no duermo o duermo demasiado. Creo que no puedo ostentar mucho lucidez en este momento pero si decir que todo lo que la vida de mentira que se reflejaba sobre los electrodomésticos se había acabado. Y si tomas quería estar ahí como fantasma mudo que este, no era nada. Todas las personas que lo configuraban como persona eran una madre corrupta por las frustraciones y tres pedazos de carne muerta. El es un cadáver viviente, un muñeco para recordarme mi proeza. A veces me dilato, no se donde estoy o cuanto tiempo paso. Todo es parte del juego bobo de la culpa. No encuentro los cadáveres, ¿los perdí? ¿Los mate de verdad?, seguro me los estoy comiendo, para ver si queda algo de mi en ellos. Me olvidaron?. Tomas no aguanta más. Esta bien. Todo más que bien. Siempre que la luna me mira yo me acuerdo de cuando era niña; tímida y con miedo a todo. Las manos de leche me temblaban cuando me invitaban a jugar con otros niños. Que feo eso, Que feo es tener miedo de chiquita. Basta. Un día los vecinitos me invitaron a jugar con ellos. Para no molestar a mama que ya estaba sofocada de mi incapacidad de socializar acepte Ir. Fuimos a un baldío con los chicos, uno me señalo una perra. Se notaba que pasaba frió, hambre. El nene que me había invitado me dijo que la tenía que matar. Me dijo que se había comido a las crías recién nacidas. Se había comedio a las crías, llore mucho cuando me lo dijo. No se por que me dolió tanto eso. Que animal horrible, que monstruo tan feo pensé. Agarre un palo y le empecé a dar muchos golpes. ¡Mala!¡mala! le gritaba. Todos los otros miraban. Yo lloraba y le pegaba. ¿Por que te las comiste? ¿Por que? La pobre era una bolsa de sangre para cuando ya me había cansado. Todos me miraron raro, como tomas a su padre muerto. Yo tenia tanta rabia, se había comido a las crías. No se por que me afecta tanto eso. No se por que se me viene a la mente cada vez que espió a la luna. Llame a la policía, creo. Hace un rato, ayer o antes de ayer. 5 minutos ya. Una hora y llamo de vuelta. No se por que tardan tanto. Seguro tardan por que varias mujeres en el mundo o en la cuadra deben pensar igual que yo. Que hay un universo donde el rayo de sol no llega, donde la angustia es carne, donde llorar todas las mañanas en el baño es un lugar común, tomar anti depresivos e ir al supermercado. Yo me entiendo, no espero que nadie lo haga. No me mires con compasión, no me mires. Estoy segura que la policía esta por llegar, voy a seguir esperando.

2 comentarios:

fede... dijo...

wooooooooooooow!!! tremendo tremendo tremendo! me encantó! estoy más que flasheado. una jo-yi-ta. mis más humildes felicitaciones para ud. el final con la anécdota de la infancia es increíble, al igual que todo el texto. gracias miles! alfonso. (dicho aparte: esto presentalo en algún lado, concurso o algo así. pulilo un poco y dalo a conocer de algún modo. es esa mi opinión. salut!)

fede... dijo...

pd: aparece como 'fede' porque está configurada la compu con la dirección de mi hermano. ep